Hoy día 10 arranca en el Grand Palais el concurso hípico de saltos organizado por Qatar y la empresa de gran lujo Hermès. Como todo el mundo sabe, la hípica es un deporte bastante elitista, sobre todo, en sus versiones de doma y salto. No sólo los caballos de competición y su mantenimiento son carísimos, también el entrenamiento del animal y del propio jinete suponen un gran desembolso. Es un acontecimiento deportivo y social de primer orden al que muy pocos tienen acceso. Al ser lugar de reunión de ricos y famosos, la expectación mediática que levanta es enorme pero pocos se paran a mirar lo que hay detrás del concurso. En los Campos Elíseos se han instalado unas carpas para "alojar" los caballos. No sabéis qué olor se respira al pasar por allí. Os dejo con las imágenes.
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